ALLEGRA NON TROPPO
Nunca había viajado con mi laptop. No sé para qué me la traje. La vine a sacar del bulto el viernes, tres días después de haber llegado a Nueva York y al día siguiente de haberme quedado. Lo que sí sé es que la laptop fue un factor importante a la hora de quedarme.
Pues qué les cuento. Como les dije, me estoy quedando en casa de Allegra. No he dicho nada de ella, lo sé. Lo primero que diré sobre ella es que es una de mis mejores amigas de la vida. En un post anterior insinué que entre ella y yo podía haber un trasunto erótico, pero nada que ver. Ya quisiera yo, sin embargo. Pero Allegra tiene mucho mejor gusto que eso. Tengo la impresión de que me puso en la bandeja de “amigo” a los diez minutos de haberme conocido. Digo esto con pesar, pero si no hubiera sido por ese “instant connection” que tuvimos no nos hubiéramos hecho los amigos que somos.
Allegra es italiana. De Trieste para ser exacto. Dicen que las italianas más bellas son las Trieste. Digo, eso es lo que Allegra dice que dicen en Italia. La ciudad queda noreste de Italia, casi en la frontera con Eslovenia. A juzgar por Allegra, las mujeres de Trieste son rubias y más blancas que la sureñas.
Si mal no recuerdo, conocí a Allegra en algún momento de 1997. Yo vivía y estudiaba en Nueva York. La conocí en casa de Eulalia, una amiga española. Lo de Allegra y yo fue amistad a primera vista. No sé cómo empezamos a hablar, pero sí recuerdo que esa noche nos despedimos con uno de esos abrazos que uno sólo le da a los mejores amigos del sexo opuesto. Hemos sido grandes amigos desde aquel día.
Desde que regresé a Puerto Rico en 1998 veía a Allegra –aproximadamente- una vez cada dos años. En 1999, despedí el año con ella en la casa de unos amigos suyos, a las afueras de París. Pasé el verano del 2001 con ella en el apartamentazo de su padre en un piso 63 de la 57 y Lexington. Y en el 2003, volvimos a despedir el año, esta vez en Culebra.
Como dije en el post anterior, Allegra vive en la calle 10, entre 5ta y 6ta, en un apartamento de un cuarto, casi tan espacio como el que yo tengo (¿o tenía?) en Puerto Rico. La diferencia es que yo pago $400 de hipoteca y ella $2,800 de renta (que para esa área es una ganga, debo decir). Se puede dar ese lujo pues trabaja en una prestigiosa casa de corretaje como analista financiera. No he dicho que Allegra estudió lo mismo que yo: literatura comparada. Ella en la Universidad de Bologna (ver Umberto Eco), yo en la UPR (no hay mucho que ver).
Tenía esta idea de empezar a contar mis aventuras neoyorquinas, pero ya ven lo que salió: un longa que no llevó a ningún lado. Lo que se ve en la foto de arriba es la fachada del edificio donde vive Allegra.
4 Comentarios:
Oye Plop como es que ella termino de analista financiera?? Inquiring minds want to know!! esa seria una historia interesante...
No es tan interesante que digamos. Empezó en BNP Paribas en la oficina de patronazgo cultural. Luego, one thing led to another y se movió a otras áreas del mismo banco. Decidió hacer MBA, se fue para NYC y ahí fue cuando la conocí.
Medio gulembo... cuenta más, coño...
En la 6ta y 42 (disclaimer: si no me traiciona la memoria de un chorro de calles cuyos nombres son un chorro de números resbaladizos) hay un sitio grasoso que vende alcapurrias y otras delicias piñoneras, por si te pica la vena.
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