lunes, febrero 19, 2007

NUNCA ES TARDE SI LA BICHA ES BUENA

Salgo del clandestinaje porque la indignación no me deja otro remedio. Hoy, la revista dominical de El Nuevo Día, publicó un artículo bastante insípido sobre los adictos al sexo, en el que se trataba el tema de la manera más superficial y pusilánime posible. Me encojona el periodismo moralizante que se practica en este país.

Ahora bien, por favor compare el reportajito de END con el artículo que incidentalmente fue la portada de la revista dominical de El País, en España: una exploración de lo que se me antoja llamar la ciberrevolución sexual, la recoonfiguración de las coordenadas sexuales que se ha dado con el irrumpimiento del internet. El artículo también habla de cómo, en España, el sexo se ha liberalizado, sobre todo para las mujeres. En ningún momento, el autor pasa juicio. Se limita a documentar una realidad social y punto.

Así que hay está: Mientras en PR, el sexo es enfermedad, en España es placeres múltiples.

Regreso a mi clandestinaje.