miércoles, noviembre 30, 2005

APOLOGIA DE STEPHEN MERRITT


Cuando a finales de 1999 los críticos de música pop en EE.UU. publicaron sus listas de los mejores discos de ese año, uno que figuró entre los primeros lugares de ésas lista fue el disco triple “69 Love Songs” de la banda The Magnetic Fields. Si hay un disco que se merece el manoseado epíteto de “tour de force” es éste. Legiones de hipsters dan fe de ello. El título lo dice todo: 69 canciones de amor. Stephen Merritt es el genio detrás de esta obra maestra. Merritt ha sido descrito como el Cole Porter de estos tiempos. Y la verdad es que su talento como compositor es descomunal. Es un verdadero maestro del fino arte de unir música y palabra. Sus melodías suelen ser simples, pero exquisitas, en la mejor tradición pop. Por otro lado, sus letras suelen ser graciosas, pero sobretodo “quirky”. Merritt no suele esconder el hecho de que es gay, elemento que añade gracia a canciones como “The Luckiest Guy on the Lower East Side”. Una de mis canciones favoritas es “Come back from San Francisco”, de donde salen las siguientes dos estrofas.

Come back from San Francisco
It can’t be all that pretty
When all of New York City misses you
Should pretty boys in discos
Distract you from your novel
Remember I’m awful in love with you

You need me like the wind
Needs the trees to blow in
Like the moon needs poetry
You need me

Pero, en mi opinión, ninguna más genial que “I Don’t Want to Get Over You”:

I don’t want to get over you
I guess I could take a sleeping pill
And sleep at will
And not have to go through
What I go through
I guess I could take Prozac, right,
And just smile all night
At somebody new
Somebody not to bright
But sweet and kind
Who would try to get you off my mind
I could leave this agony behind
Which is just what I’d do
If I wanted to
But I don’t want to get over you
Cause I don’t want to get over love
I could listen to my therapist,
Pretend you don’t exist,
And not have to dream of
What I dream of
I could listen to all my friends
And go out again
And pretend it’s enough
Or I could make a career of being blue
I could dress in black and read Camus
Smoke clove cigarrettes and drink vermouth
Like I was 17
That would be a scream
But I don’t want to get over you

En esa canción estaba pensando cuando decidí escribir este “post”.

LOS MONOLOGOS DEL INSOMNIO


Son las 3:14 a.m. y no tengo sueño. Odio que me pase esto. Mañana tengo cosas que hacer, pero sé que, como quiera, dormiré hasta la hora que mi cuerpo entienda necesaria. Así ha sido mi vida por los últimos dos años, desde que renuncié al trabajo que tenía. No sé por qué me quejo tanto. Tengo una gran vida. Trabajo poco, lo suficiente para tener una vida modesta, pero decente. Soy dueño de mi tiempo. Casi siempre me levanto más o menos a las 10:00 a.m., y me acuesto entre una y dos de la mañana. Es como si viviera en un eterno fin de semana. Sigo sin saber por qué me quejo tanto.

martes, noviembre 29, 2005

ULTIMA HORA: EL MODERNISMO VIVE


Estimados lectores, lo que leerán a continuación es una exclusiva de La Insula Hirsuta. Se trata de una carta enviada por una lectora a un diario de la capital. Nos hemos dado a la tarea de difundirla, dado que el periódico en cuestión decidió no hacerlo. Gracias al amigo que me suministró esta joya de la literatura boricua.

Señores:

El hedor a excremento que emana de algunos escritos publicados en nuestra prensa acerca de temas que deben respetarse por la reverencia que merecen sus protagonistas, usualmente nos mueve a la repulsión y a no perder ni un minuto de nuestra atención en ellos. Pero cuando se llega al colmo del inuendo con suposiciones chabacanas que intentan restarle hasta el valor de la autoría del propio discurso de las ideas de un patriota y mártir, cuya vida fue ejemplo de entrega total al ideal de nuestra nacionalidad, nuestra reacción de ira profunda y deseo visceral de rechazo y castigo no tiene límites.

Marcos Pérez Ramírez (Los libros de Filiberto; El Nuevo Día, domingo 20 de noviembre) merece que se le someta a una sesión perpetua de lecturas obligatorias, forzadas y continuas de las banalidades y atrocidades que diariamente producen los que, como él, no entienden lo que son los principios morales y los valores humanos que distinguen a las personas de los reptiles. Sospechamos, sin embargo, que su gran intelecto continuará bovinamente inmerso en la ponderación de las profundas ideas en obras tan trascendentales como los anuncios clasificados.

Que Dios nos favorezca si nos vemos precisados a intentar leer algunos de sus libros preferidos. El mero repaso del listado de sus títulos de seguro produce una violenta reacción adversa de cualquier sistema digestivo.

Otra Boricua Machetera
Fulana de Tal
Calle nombre de prócer #000
Urb. Baldrich
San Juan, PR 00918

lunes, noviembre 28, 2005

CARLA CAPPALLI: ¿ACTIVISTA O CHARRA?


No sé ustedes, pero yo no sé qué pensar de toda esta cosa de Carla Cappalli protestando desnuda en contra de la crueldad a los animales. Estoy de acuerdo en que está mal abusar de los animales. Y si estas protestas, un calco de las que se hacen en Europa, sirven de algo, es decir, desmotivan a la gente de que vayan a ver el circo de Barnum & Bailey, pues fine. Pero confieso que estas manifestaciones me parecen un poco charras. Y que no se me malentienda: me encanta la idea de que la gente se desnude en público. Sería genial que a Puerto Rico viniera Spencer Tunick, el fotógrafo gringo que se ha hecho famoso por sus retratos de mares de cuerpos desnudos en lugares públicos del mundo.


Lo más que me llama la atención de la Cappalli es el exhibicionismo solapado de sus manifestaciones. A ver si me explico: Carla Cappalli está buena, y ella lo sabe. A lo que voy es que si yo tuviera su cuerpo, me desnudaría en protesta de hasta la más mínima estupidez. ¿Alza en el precio del café? ¿Edificios enfermos en la UPR? ¿Golpe de estado en la Unión Independiente Auténtica? Allá voy y pelo pa’ abajo.

Una pregunta que tengo es: ¿Por qué la Cappalli estaba sola en su protesta? ¿Será posible que en el Condado no hay más blanquitas con ganas de enseñar sus cuerpos? Con lo que gastan en cirujanos y personal trainers, pensaría que por lo menos dos o tres más querrían mostrar sus carnes al resto de Puerto Rico. Pero no, allí estaba ella sola, con un panty sexy de Victoria’s Secret que probablemente compró para la ocasión. Me encanta que Carla Cappalli muestre sus atributos físicos, pero me parece un poco charro que use una causa humanitaria para validar lo que a todas luces es una forma de decir: I’m too sexy for your circus.

Y una pregunta más: ¿Qué tiene que ver una mujer desnuda con elefantes maltratados? Alguien me recordará que la Cappalli tenía tres heridas maquilladas en las espalda. Y yo diré: Pudo haber enseñado sólo su espalda. Lo de esnuarse haría sentido si la protesta fuera en contra de los abrigos de pieles. ¿Pero por leones enjaulados? Para eso mejor que llamen al performero Bernat Tort para que haga un remake de aquel performance famoso que hizo en la UPR en el que se hizo amarrar, desnudo, a una columna de una glorieta, para que luego un ayudante le diera diez latigazos. ¡Eso es un statement en contra de la tortura!

sábado, noviembre 26, 2005

HOMENAJE A ALAN RUCK


Mi fin de semana se ha convertido, sin que yo lo hubiera planificado, en una retrospectiva del actor Alan Ruck, famoso por su interpretación de Cameron Frye en el clásico ochentoso Ferris Bueller’s Day Off. Anoche lo vi en Twister; hoy lo vi en el sitcom Spin City. Es poco lo que sabemos de Alan Ruck; sabemos, por ejemplo, que tiene actualmente 49 años; tenía 29 cuando hizo de Cameron; y ese mismo año se casó con la que todavía es su esposa.

Anoche, mientras lo veía en Twister, pensaba en lo relativamente desafortunada que ha sido la carrera de Ruck. Él es, en el cine, algo así como un one-hit wonder. Todo el mundo recuerda su Cameron, pero no mucho más que eso. Casi nadie se acuerda, por ejemplo, de que él fue uno de los pasajeros de la guagua secuestrada en Speed. Su caso es muy parecido al de Jason Schwartzman, recordado por su papel protagónico en Rushmore... y nada más.

Porque Alan Ruck nunca dirá cuál es su “favorite curse word" en Inside the Actor’s Studio, es que me he tomado unos minutos para homenajearlo. Alan RucK merece tanto crédito como Mathew Broderick por el éxito de Ferris Bueller's Day Off. Cameron era el amigo deprimido de Ferris, el protagonista hedonista interpretado por Mathew Broderick. Si Ferris representaba lo que todos los adolescentes queríamos ser, Cameron representaba lo que realmente éramos. Y eso se agradece.

HOW TO LOSE A WEEKEND IN 10 DAYS


Ya es casi una tradición. El fin de semana de Thanksgiving, me encierro en mi casa y hago nada más que leer o ver televisión. Empecé a hacerlo cuando estudiaba en Nueva York. Fue patético. Mi roommate se fue para la casa de sus padres en Massachussets. Yo me quedé. Tuve suerte: Eddie, el portero boricua del edificio, me pasó uno de los platos de comida que había recibido de uno de los vecinos. Gracias a él, comí pavo.

Este año, las noches del jueves y el viernes han sido emblematicas. Me las he pasado viendo películas malas en TBS y TNT. Anoche fue Jurassic Park 3 y Entrapment. La noche anterior fue How to Lose a Guy in 10 days.

¡Las cosas que uno hace por un amigo!

La única razón por la que me obligué a ver How to Lose a Guy in 10 Days fue uno de sus productores, al que considero un amigo (aunque nunca lo he conocido). Hablo del legendario Bob Evans, un actor convertido en ejecutivo de la Paramount que estuvo ligado a la producción de clásicos como The Godfather, Chinatown y Rosemary’s Baby. Hoy día, Bob es un movie mogul venido a menos. Luego de un escándalo relacionado a las drogas a principios de los ochenta, no se ha recuperado del todo. Ha producido varias películas, ninguna de ellas muy memorables que digamos. Hace dos o tres años se vio a sí mismo de nuevo en el spotlight con la publicación y adaptación a cine de sus memorias tituladas The Kid Stays in the Picture.

How to Lose a Guy in 10 Days es mala de a vicio. Es la historia de una periodista (Kate Hudson) que trabaja en una revista de moda y que para columna ha decido escribir un artículo que su editora ha titulado How to Lose a Guy in 10 Days. La periodista enamorará a un hombre y luego lo someterá a todas esas cosas que supuestamente hacen las mujeres y que los hombres tanto odian: ser needy, clinging, etc. El problema es que la chica se empata con un publicista (Mathew McCounaghey) que ha hecho una apuesta de que en 10 días puede enamorar a una mujer. Si lo hace, su jefe le permitirá a hacer una importante presentación a un cliente.

Así que ambos se enfrascan en un power struggle en el que la mujer hace todo lo posible para espantar al hombre, pero éste le juega el juego con tal de ganar la apuesta. ¿El resultado? Muy poco conflicto. Supongo que la película apelará al sentido de venganza que puedan tener algunas mujeres, aunque, por el bien de la humanidad, espero que ése no sea el caso.

Ya se podrán imaginar lo que pasa después. En el proceso, ambos se enamoran. Luego, se dejan al enterarse que todo fue un juego. Al final, deciden amarse. Muy decepcionado con mi amigo Bob, apagué el televisor y me acosté a dormir.

LA DIVINA COMEDIA. PT. 1


Para la misma época en que tuve mi encuentro con Georgette, yo trabajaba en la producción de un reality show que fue un fracaso. Las condiciones de trabajo eran tan terribles que a las tres semanas de estrenado el programa, el productor ejecutivo nos anunció al núcleo de producción que nos estaría dando lay off por falta de dinero. En realidad, lo mejor que nos pudo haber pasado.

Días antes de que nos botaran, a un compañero de trabajo y a mí se nos ocurrió hacer una súper-fiesta allí mismo, en un espacio de estudio que estaba vacío. La fiesta no tendría ningún motivo más allá del deseo de hacerla. Empezamos a organizarla. En eso vino la botada, y decidimos usar la fiesta para celebrar el fin de nuestro sufrimiento laboral. El productor ejecutivo, que era también el dueño del estudio, aceptó prestarnos el espacio sin cobrarnos.

La fiesta se produjo en dos semanas o menos. Decidimos que el concepto/título de la misma iba a ser La Divina Comedia. Con tul blanco, dividimos el espacio tipo almacén en tres áreas: paraíso, purgatorio e infierno; para cada una, mandamos a hacer un rótulo en neón. Para la bebida, a través de una amiga que trabajaba en un agencia de publicidad, conseguimos un deal con una de las distribuidoras de licores.

Como entretenimiento, contratamos a dos DJs, uno de ellos, DJ Caoba. El otro DJ era desconocido pero su función era la de poner el equipo, servir de antesala a Caoba y después encargarse de la sesión de chill-out. También contratamos a una soprano que en un momento dado cantaría un puñado de arias a capella.

También contratamos a Freddy Mercado que vino con otros tres performeros. Freddy y su ejercito de la decadencia estuvo bien por un rato, pero pronto fueron opacados por lo que termino siendo el plato fuerte de la noche: los/las strppers.

Desde un principio, decidimos que queríamos strippers. La esposa del productor ejecutivo nos hizo el favor de llamar a un amigo de ella que es uno de esos strippers convertidos en media personalities que hay aquí en Puerto Rico. Él nos refirió a un individuo llamado Cisco.

Llamé a Cisco y le pedí que pasara por el estudio. Él me dijo que no había problema, que podía ese mismo día pues “estaba libre”. Si mal no recuerdo, su compañía se llamaba Cisco Fantasy Entertainment. Cisco es un cliché andante. Es gordito y calvo con una cara a medio camino entre tarado y bonachón. Cisco es bien buena gente. El que nosotros trabajáramos en televisión le gustó. Veía este guiso como una buena oportunidad de exposición. Poco meses después, descubriría que Cisco es el que le suplía strippers al programa que tenía Carmen Jovet de la Batalla de los Sexos. Todo hacía sentido.

Cisco traía consigo un mini-álbum de fotos, uno de esos que antes daban gratis con el revelado de las fotos. Éste era su catálogo. Traté de mantener un aire de seriedad y profesionalismo mientras pasaba las páginas del pequeño álbum. Decidí que mi personaje en esta película iba a ser así. Me creîa que era uno de esos ejecutivos de Hollywood durante la época del studio system. Me sentía como David O. Selznick.

Recuerdo claramente cómo le hablaba a Cisco del concepto de la fiesta, de cómo yo quería que las strippers ayudarán a crear “una atmosfera de decadencia”, que el público iba a ser gente sofisticada y que todo tenía que ser de buen gusto. Cisco decía entender a la perfección. Él conocía el mundo de la televisión, pensó con seguridad.

Sobre el roster de Cisco, puedo decir que la mayoría de las mujeres parecían sacadas de un vídeo de reggaetón. Cisco fue al grano y me recomendó a sus dos mejores mujeres y a su mejor varon. Se trataba de Bibi, una blanca, alta, con pelo rubio pintado, y Trixie, una prieta más pequeña, también conocida como la Batidora Humana, por su forma de batir sus caderas. El hombre se llamaba Pedro Javier, medía como 6’3”, blanco de ojos verdes y un cuerpo parecido al del David. Cisco me dijo que era de Lares.

Continuará.

viernes, noviembre 25, 2005

MIS VIDAS PASADAS


Hace dos años, para mi cumpleaños, un amigo me dio de regalo una cita con una clarividente mexicana cuyo nombre es Georgette. Su fama la precedía. Mi amigo me explicó que la conoció aquí en Puerto Rico, pero que había escuchando a hablar de ella cuando él vivía en México. De Georgette se decía que le había leído los pies a más de un presidente mexicano. Sí, leyeron bien: leer… los pies. That’s her thing. Así que la llamé y saqué una cita con ella.

Antes de seguir, quisiera hablar de mi relación con este tipo de cosa. Primero que nada, me declaro un aficionado de la astrología. La considero una herramienta de self-discovery tan válida como la psicoterapia. Escuchando a mi astróloga leer mi carta aprendí cosas demasiado parecidas a las que aprendí en la oficina de la que fue mi terapeuta hace varios años. He llegado a la conclusión de que ambos son sistemas de representación de la personalidad, y que funcionan en la medida que uno los asuma.

Pero hay otra cosa. No me gusta que me lean el futuro. El porqué de esto, es algo que me da trabajo explicar, pero tiene que ver con cómo este tipo de práctica suele sobrealimentar el ego, en mi caso, cierto complejo mesiánico que viene con haber estudiado en un colegio de jesuitas, esos que un amigo muy acertadamente llamó los Jedi Knights de la Iglesia Católica. En otras palabras, no necesito el estrés de creerme que estoy en el mundo para salvarlo. Sí, soy Luke Skywalker al principio de la Star Wars original. Cuán patético.

Habiendo dicho esto, puedo continuar con la historia de Georgette.

Era de noche y llovía mucho mientras subía por la carretera de Caimito que me llevaría a la casa donde Georgette me esperaba. Yo esperaba una brujita en personaje, pero lo que encontré fue todo lo contrario. Georgette debe estar en los treinta, pero parece de veinticinco. Es una chica sumamente menuda. Me fui de allí pensado que había comprado su ropa en The Gap.

Georgette me hizo sentar con las piernas estiradas en un futón que había en el piso. Se sentó frente a mis pies y empezó a palparlos. Lo hizo por lo que parecieron ser dos minutos. Luego, me dijo que sentara cómodo, y empezó a hablar.

Habló sin parar por aproximadamente 45 minutos. Lo que hace Georgette es fundamentalmente pintar un cuadro de uno. En ese sentido, es igual a un pintor de Montmartre; se vale de sus sentidos, en el caso de ella, extrasensoriales para hacer un retrato de su sujeto.

Ya ni recuerdo que fue exactamente lo que me dijo. Sí recuerdo que todo lo que me decía me hacía sentido y hasta me recordaba cosas que ya había escuchado en la boca de mi astróloga o de mi psicóloga. Pero hay una parte de la que sí me acuerdo.

Hacia el final de la sesión, Georgette me anuncia que ahora me hablaría de mis vidas pasadas. Yo, que no sabía que esto era parte del package, me pasmé un poco, pero puse mucha atención.

“En la mayoría de tus vidas anteriores, has sido hombre y guerrero”, me dijo antes de repasar algunas de estas existencias pasadas. Georgette me contó que fui parte del ejercito de Atila, el Huno. Me habló de una herida que recibí en batalla y por la cual tuve que convalecer durante mucho tiempo. Me habló de un rollo con una mujer que ya ni recuerdo. Pero ésa no fue la única vida de la que me habló. Me dijo que estuve en París durante la época de revolución. También tuve algo que ver en la 1ra Guerra Mundial. De cada vida, me daba detalles. Como dije, en todas, era soldado. Ella me describía como un militar de alto rango, un mercenario que no lo pensaba dos veces antes de usar mi espada, bayoneta o rifle contra el enemigo.

Georgette guardó la gran revelación para el final. En mi pasada vida, fui un oficial nazi. “Tenías acceso a Hitler y hablabas cuatro idiomas: alemán, ruso, polaco y yidish”, me reveló. Yo estaba mitad consternado, mitad fascinado. Para mi tranquilidad, me dijo que tuve la oportunidad de arrepentirme, lo que supongo que significa que mi tara kármica no es tan pesada.

Mientras yo escuchaba a Georgette contar todas estas historias fantásticas, pensaba que esto era mejor que leer un libro de García Márquez. Lo tomé todo como literatura, pero qué gran literatura. Y fue genial porque me hizo pensar, no sólo en mí, mi historia y mis rollos, sino también en la función del arte y, sobretodo, de la literatura. Escuchándola, entendí que la función del arte es servir de espejo donde mirarnos y conocernos un poquito más.

Una cosa que me chocó fue que casi todos los amigos a los que les conté la parte del soldado nazi tuvieron las misma reacción: “Eso explica mucho; ahora te entiendo mejor”. Yo todavía no entiendo, aunque debo decir que las palabras de Georgette estuvieron muy presentes en mi mente durante el viaje que hice este año a Berlín. Muy dentro de mí, buscaba encontrarme con mi pasado yo.

CARTA ASTRAL (CONT.)


Y ésta es la carta del autor de La Ínsula Hirsuta, nacido el 13 de noviembre de 1973, a las 3:20 a.m., en San Juan, Puerto Rico, lo que lo hace escorpión con asecendente en libra.

CARTA ASTRAL


Ésta es la carta astral de La Ínsula Hirsuta, nacida el 17 de abril de 2005, a la 1:17 a.m., lo que la hace aries con ascendente en acuario. Le doy la bienvenida a cualquier astrólogo que quiera ofrecer su lectura de la misma.

martes, noviembre 22, 2005

HOMENAJE A CIORAN 1


La Ínsula Hirsuta anuncia el inicio de un homenaje al escritor rumano-francés E.M. Cioran (1911-1995).

De Ese maldito yo:

Publicar un libro implica el mismo género de contrariedades que una boda o un entierro.

***

No habría que escribir nunca sobre nadie. Tan convencido estoy de ello que cada vez que no tengo más remedio que hacerlo, mi primer pensamiento es atacar, incluso si lo admiro, a aquel de quien debo hablar.

***

Llega un momento en que hasta la negación pierde su brillo y, deteriorada, va, como las evidencias, a la cloaca.

***

Nada es fastidioso para aquel a quien mueve la manía de la profundización. Impermeable al aburrimiento, se extenderá indefinidamente sobre cualquier cosa, tratando sin miramientos, si es escritor, a sus lectores, y sin dignarse incluso, si es filósofo, a tenerles en cuenta.

***

Mis libros, mi obra... El carácter grotesco de esos posesivos.

Todo se pervirtió el día que la literatura dejó de ser anónima. La decadencia se remonta al primer autor.

TO THICKEN THE PLOT 1.2


Continuación de la discusión sobre cine y literatura. Advierto que hace rato me fui por la tangente.

¿De dónde sale el talento artístico? ¿Cómo se manifiesta?

Antes de empezar a contestar estas preguntas, quisiera usar de ejemplo a los deportistas. La otra noche, veía en cable una entrevista a Oscar de la Hoya. El entrevistador le pidió al púgil una demostración de rutinas, y luego, deslumbrado con la velocidad de los puños del boxeador, le preguntó cómo lo hacía, a lo que de la Hoya contestó: “I don’t know; i guess it’s a gift.” Estoy de acuerdo con esta respuesta. Para mí es innegable que Tiger Woods tiene un “gift” para el golf, así como Larry Bird lo tenía para el baloncesto. Tengo un hermano que llegó a ser un gran prospecto del basket local y lo de él también era un “gift”. Desde muy pequeño, demostró una habilidad inexplicablemente innata para ese deporte.

Pero iré más allá. Tomemos el ejemplo de Michael Jordan. Siempre he pensado que Jordan es una de las personas más inteligentes del planeta. Me explico: ¿usted sabe la inteligencia que hay que tener para saber qué hacer en cualquier momento dado de un juego de baloncesto profesional? Eso es intelligencia. No es la inteligencia de un matemático o de un filósofo, sino otro tipo de inteligencia. Llamémosle inteligencia baloncelística. A Jordan le ha servido para ganarse la vida.

Creo que lo mismo pasa en las artes. No dudo que lo de Picasso haya sido un “gift”, o sea que tenía un talento natural. Igualmente, podríamos decir que lo que tenía Mozart era una inteligencia musical mucho más desarrollada que la de sus contemporáneos.

Pero hay un asunto. Tanto los deportes como las artes son fenómenos culturales y no naturales. Por ejemplo, un cheetah corre rápido porque eso le permite alcanzar a la gacela que se quiere comer. Eso es un talento natural que le ha permitido sobrevivir en el mundo de los más aptos. En ese sentido, hace sentido que haya nacido con ese talento. Pero en el caso de un atleta o un creador, qué sentido hace que hayan nacido con el talento para meter la bola en un canasto o para componer la más hermosa sonata.

Hoy día, es políticamente incorrecto hablar de genios o prodigios. No hay nada que atente tanto contra el ideal francés de egalité que la idea que todos somos iguales, pero unos más otros. Nos han hecho creer que cualquiera puede llegar a ser artista o deportista por medio de la educación y/o el entrenamiento. That remains to be seen.

Pero quiero retomar el asunto cultural. Si el baloncesto nunca hubiera sido inventado, qué hubiera sido de la vida de Larry Bird. Si la ópera nunca se hubiera desarrollado como género, qué hubiera sido de la vida de Pavarotti. Nunca sabremos la respuesta a esta pregunta, pero no descarto la posibilidad de que Bird no pasara de ser un "hick" de Indiana, y Pavarotti, un gordo del pueblo italiano de Modena.

Aunque quién sabe. Usemos de ejemplo a Raymond Ayala. Qué hubiera sido de la vida de Raymond, si hubiera nacido en otra época que no fuera ésta. Si hubiera nacido en los setenta, ¿hubiera grabado con la Fania? Hmm, buena pregunta. Pues la verdad es que no sé. Raymond canta reggaetón, un género que es culturalmente equivalente a la salsa, pero no sé si requieren las mismas destrezas musicales. Pero, saben qué, apuesto a que sí: este chamaco de Vista Hermosa hubiera sido tan bueno como Andy, Pellín o Ismael. Dicho sea de paso, el nombre artístico de Raymond Ayala es Daddy Yankee.

No he empezado ni a entrar en los temas que quería tocar. Lo haré en un próximo post.

TO THICKEN THE PLOT 1.1


Respuesta del desentramado al comentario que yo le hiciera sobre el tema del cine versus literatura.

Entiendo lo que dices del teatro como aventura y el cine como trinchera, pero hago la salvedad de que la experiencia de mi amigo director viene de sus producciones estudiantiles. Es obvio que el idealismo y la fe en la ¨magia¨ de la colaboración no ha muerto aunque sé que en la medida en que se profesionalize y haya dinero envuelto todo cambiará. Sin embargo yo creo que no debería renunciar el director de cine a la posibilidad de un encuentro trascendental con los demás artistas envueltos en la producción: guionista, director de fotografía, director de arte, elenco, compositor, editor, etc. Creo que las buenas películas se logran cuando esta colaboración cuaja y hasta cierto punto es responsabilidad del director desarrollarla.
El énfasis en los ¨autores¨ cinematográficos está anticuado y más que passé en cuanto a la crítica y la teoría se refiere. Pero creo que es así porque la figura del director/autor -muy distinto al writer/director- está más que establecida. Godard, Truffaut y Hitchcock son tan autores de sus películas como Spielberg, Micheal Bay y Emmrich (Independence Day, The Day After Tomorrow) lo son de las suyas. Arte y comercio no tienen porqué estar encontrados (Hitchcock, Spielberg) igual que hay autores cinematográficos que no tienen que ver nada con el arte (Micheal Bay, Emmrich). Ahora bien, si hacemos un sondeo de todos los estudiantes de cine actuales me atrevería a apostar que la mayoría van a querer ser más como Spielberg que como Godard. Lo que pasa es que en Puerto Rico estamos al revés de los cristianos.

A lo que yo contesto:

El cine es un proceso, más que nada, industrial. En ese sentido, es parecido a la creación de un carro o una nevera. Anoche mismo leí dos artículos de García Márquez que vienen al caso. En uno, se planteaba el asunto de por qué los guionistas son universalmente ignorados. En el otro, contaba de cuando fue jurado en Cannes y una de las películas que ganó fue una turca dirigida por su cineasta-creador desde la cárcel en la que estaba preso por razones políticas. García Márquez se preguntaba hasta qué punto la película había sido de él y no de la persona que ejecutó su plan de filmación en el set.

Y eso que todavía no hemos hablado de cómo la película se puede ir a la mierda en el cuarto de edición.

lunes, noviembre 21, 2005

GOD BLESS THE PILGRIMS


Tengo una prima que hizo su especialidad en pediatría en Boston. Ahora vive de nuevo en Puerto Rico. Hoy me llamó para invitarme a su cena de Thanksgiving. “Va a ser un Thanksgiving ‘New-England-style’”, me dijo por teléfono. “El pavo en vez de estar relleno de…” Pero era muy tarde; yo ya había entrado en autista-mode y no capté ni una palabra más de lo que me dijo. Esta es mi forma de bregar con mis parientes penepés.

LOS BOBS DE LA DW


La Deutsche Welle acaba de anunciar sus premios a los mejores blogs del mundo. El ganador fue una blogonovela argentina de Hernán Casciari titulada Más respeto, que soy tu madre.

UNA BUENA Y UNA MALA


Tengo una buena noticia y una mala noticia. La buena es que, según la prensa, Julián Gil se va a vivir a Miami en enero. La mala es que las cosas en Puerto Rico están tan malas que ni los argentinos quieren vivir aquí.

TO THICKEN THE PLOT


Un post en Desentramados suscitó la siguiente contra-reflexión.

El autor de Desentramados acaba de publicar una interesante reflexión sobre la diferencia entre realizar una película y escribir una novela, ninguna de las cuales él, admite, ha hecho. El escrito resume un debate que tuvo con un amigo suyo en ruta de San Juan a Mayagüez.

Dice el desentramado: “Mi amigo apostaba por el cine basándose en limitaciones psíquicas que el percibe como suyas. Alega que tiene adult ADD y un grado de autismo altísimo, aunque funcional, y que por esto se nutre de la naturaleza colaborativa del cine. La literatura es un oficio solitario por necesidad que solo puede desembocar en misantropía.” Sobre esto tengo que decir que yo también sufro de adult ADD y que por eso mismo dudo mucho de mis capacidades para hacer una película (y/o escribir una novela, for that matter). Ahora bien, el ADD se presta para escribir poesía y componer canciones.

Continúa el desentramado: “Mi amigo contestó con su primer argumento de peso: la magia que se produce en un set cinematográfico cuando miras a tu alrededor y te topas con colaboradores talentosos, cada cual trabajando activamente para lograr una comunión de esfuerzos. La tensión que se lee en el rostro de artesanos concienzudos, todos con la misma preocupación: ¿quedará bien esto que estamos haciendo?” A lo que yo digo: El amigo del desentramado está equivocado. Él está hablando del teatro, no del cine. En el teatro, todo es adrenalina, la aventura del real-time, el feedback instantáneo del público, la unicidad de cada función. Cualquier actor que se respete escogerá teatro sobre cine any day of the week. Por su parte, un set de filmación es tan sexy como un frente de guerra. Porque entre una película y la toma de Fallujah no hay mucha diferencia. ¡Claro que también hay adrenalina! Pero es otra, a darker shade of adrenaline. If you call that magic, ése es tu problema; recomiendo que you get yourself checked. And if you get a kick from working with construction workers (porque eso es lo que son los técnicos), you might want to consider actuallly working in construction.

Pero hay otra cosa. Es hora de que traigamos a la discusión el siempre presente tema del eros. Todo ese discurso de la magia colaborativa es una forma bonita de decir 'quiero acostarme con la maquillista'. En ese sentido, y esto es sumamente subjetivo, un director, actor o productor tiene más posibilidades de tener sexo en virtud de su oficio que un escritor. Y estoy hablando solamente de on-the-job sex, porque en ciertos círculos los escritores están muy bien cotizados sexualmente.

Y otras cosa, y ya termino: ¿Por qué todavía nos aferramos al cineasta auteur? ¿Por qué nadie quiere ser como Steven Spielberg, escritor de muy, pero que muy pocas de sus películas, pero reconocido universalmente como un gran storyteller y uno de los hombres más ricos de Hollywood? Fuck art.

Having said all of this, creo que en esta discusión hay mucha más tela que cortar. Y no es sólo la cuestión de cineasta versus escritor, sino el asunto de cómo uno canaliza la creatividad, cómo uno encuentra su voz artística, por qué vías la desarrolla. Esto es un asunto que he tenido últimamente muy presente. Espero seguir escribiendo sobre el tema.

sábado, noviembre 19, 2005

SHOCK CORRIDOR


Le doy las gracias al autor de Desentramados por publicar el "portrait" que me hiciera hace unos días y en el que se aprecia vagamente mi "darkly mysterious personality". Para leer el calce original de la foto, clickee aquí.

EL CORAZON DELATOR


Comprar libros es sin duda mi vicio más desarrollado. Nótese que dije “comprar”, pues si leo uno de cada de diez libros que compro, es mucho. En lo que a todas luces constituye un “shopping spree”, hoy fui a Borders y luego a La Tertulia, y me compré seis libros: “Less Than Zero”, de Brett Easton Ellis; “The Portable Poe”; “My Name is Red”, de Orhan Pamuk; “Sideways”, de Rex Pickett; “The Diary of Anaïs Nin: Volume I (1931-1934); “Defensa apasionada del idioma español”, de Alex Grijelmo, y “Ortografía esencial del español”. También aproveché y me compré dos discos: el de Calle 13 y el de Mima que es una cantautora lounge, ambos música fresca del país. Lo preocupante del caso es que sólo estaba buscando Less Than Zero; los otros fueron selecciones “off the shelf” y “spur of the moment”. La lista, como el corazón del cuento de Poe, me delata. Estoy convencido de que, a partir de la misma, un especialista (en qué, no sé) podría llegar a conclusiones bastante contundentes sobre mi estado perpetuo de “existential angst”, eso que los franceses llaman “ennui” y que mi terapista alguna vez llamó "dysthymia".

HEROIN CHIC


Leyendo un artículo en Vanity Fair sobre Kate Moss y su reciente infortunio con la coca, he encontrado una cita sumamente inspiradora. El escultor inglés y amigo de la modelo, Marc Quinn, cree en eso de que lo que no te mata, te hace más fuerte. Sobre el efecto de todo este escándalo en la imagen de Moss, ha dicho: “She’ll come out a more culturally complex figure.” De repente, siento que tengo algo a qué aspirar.

THE GREAT WHITE HOPE?


Esta imagen la saqué del booklet del disco de Calle 13.

viernes, noviembre 18, 2005

SI CAYO, ¿OTORGO?


Acompaño esta “action photo” de Vicente Juarbe, director de Cayo, con el comunicado de prensa que anuncia las 58 películas que fueron sometidas a la competencia por el Oscar a la mejor película en idioma extranjero. Tengo una lectoría muy cinéfila, y a ellos les pregunto: ¿cuáles son los “odds” de Cayo? Yo pongo mi dinero en la película de Tayikistán (wherever that is).

The Academy of Motion Picture Arts and Sciences has announced that a record fifty-five countries, including first-timers Costa Rica, Fiji, and Iraq - plus Palestine, Puerto Rico, and Hong Kong (which somehow still manages to get into the roster as if it were an independent state within China) - have submitted films for consideration in the Best Foreign-Language Film category.

Among the 58 submissions are Berlin Film Festival Best Director and Best Actress (Julia Jentsch) winner Sophie Scholl - Die letzten Tage / Sophie Scholl – The Final Days (Germany), directed by Marc Rothemund; Bohdan Sláma's Stesti / Something Like Happiness (Czech Republic), winner of the Golden Shell for Best Picture at the San Sebastián International Film Festival; Cristi Puiu's Moartea Domnului Lazarescu / The Death of Mr. Lazarescu (Romania), winner of the Special Jury Prize at the Chicago International Film Festival; and Reza Mir Karimi's Best Picture winner at the 2005 Iran Cinema Celebration Awards, Kheili dour, kheili nazdik / So Close, So Far (Iran).

Also, Cristina Comencini's La Bestia nel cuore (Italy), which won Giovanna Mezzogiorno the Best Actress award at the Venice Film Festival; the Palm d'Or winner at the Cannes Film Festival, Luc and Jean-Pierre Dardenne's L'Enfant / The Child (Belgium); Hany Abu-Assad's controversial tale of two Palestinian suicide bombers, Paradise Now (Palestine); and Tsai Ming-liang's sexually-charged Golden Horse Award Best Picture nominee Tian bian yi duo yun / The Wayward Cloud (Taiwan).

Full list of submitted films:

Argentina, El Aura, Fabian Bielinsky, director;
Bangladesh, Shyamol Chaya, Humayun Ahmed, director;
Belgium, L'Enfant / The Child, Jean-Pierre and Luc Dardenne, directors;
Bolivia, Say Good Morning to Dad, Fernando Vargas, director;
Bosnia & Herzegovina, Totally Personal, Nedžad Begovic, director;
Brazil, 2 Filhos de Francisco / Two Sons of Francisco, Breno Silveira, director;
Bulgaria, Stolen Eyes, Radoslav Spassov, director;
Canada, C.R.A.Z.Y., Jean-Marc Vallée, director;
Chile, Play, Alicia Scherson, director;
China, The Promise, Chen Kaige, director;
Colombia, La Sombra del Caminante / The Shadow of the Traveler, Ciro Guerra, director;
Costa Rica, Caribe, Esteban Ramírez, director;
Croatia, A Wonderful Night in Split, Arsen Anton Ostojic, director;
Cuba, Viva Cuba, Juan Carlos Cremata Malberti, director;
Czech Republic, Stesti / Something Like Happiness, Bohdan Sláma, director;
Denmark, Adam's Apples, Anders Thomas Jensen, director;
Estonia, Shop of Dreams, Peeter Urbla, director;
Fiji, The Land Has Eyes, Vilsoni Hereniko, director;
Finland, Mother of Mine, Klaus Härö, director;
France, Joyeux Noël / Merry Christmas, Christian Carion, director;
Georgia, Tbilisi-Tbilisi, Levan Zakareishvili, director;
Germany, Sophie Scholl - Die letzten Tage / Sophie Scholl – The Final Days, Marc Rothemund, director;
Hong Kong, Perhaps Love, Peter Ho-Sun Chan, director;
Hungary, Sorstalanság / Fateless, Lajos Koltai, director;
Iceland, Ahead of Time, Ágúst Gudmundsson, director;
India, Paheli, Amol Palekar, director;
Indonesia, Gie, Riri Riza, director;
Iran, Kheili dour, kheili nazdik / So Close, So Far, Reza Mir Karimi, director;
Iraq, Requiem of Snow, Jamil Rostami, director;
Israel, What a Wonderful Place, Eyal Halfon, director;
Italy, La Bestia nel cuore / The Beast in the Heart , Cristina Comencini, director;
Japan, Blood and Bones, Yoichi Sai, director;
Korea, Welcome to Dongmakgol, Kwang-hyun Park, director;
Luxembourg, Renart the Fox, Thierry Schiel, director;
Mexico, Al Otro lado / On the Other Side, Gustavo Loza, director;
Mongolia, The Cave of the Yellow Dog, Byambasuren Davaa, director;
The Netherlands, Bluebird, Mijke de Jong, director;
Norway, Kissed by Winter, Sara Johnsen, director;
Palestine, Paradise Now, Hany Abu-Assad, director;
Peru, Días de Santiago / Days of Santiago, Josué Méndez, director;
Poland, The Collector, Feliks Falk, director;
Portugal, Noite Escura / Dark Night, João Canijo, director;
Puerto Rico, Cayo, Vicente Juarbe, director;
Romania, Moartea Domnului Lazarescu / The Death of Mr. Lazarescu, Cristi Puiu, director;
Russia, The Italian, Andrei Kravchuk, director;
Serbia & Montenegro, Midwinter Night's Dream, Goran Paskaljevic, director;
Singapore, Be with Me, Eric Khoo, director;
Slovak Republic, The City of the Sun, Martin Šulík, director;
Slovenia, The Ruins, Janez Burger, director;
South Africa, Tsotsi, Gavin Hood, director;
Spain, Obaba, Montxo Armendáriz, director;
Sweden, Zozo, Josef Fares, director;
Switzerland, Tout un hiver sans feu / A Whole Winter Without Fire, Greg Zglinski, director;
Taiwan, Tian bian yi duo yun / The Wayward Cloud, Tsai Ming-liang, director;
Tajikistan, Sex & Philosophy, Mohsen Makhmalbaf, director;
Thailand, The Tin Mine, Jira Maligool, director;
Turkey, Lovelorn, Yavuz Turgul, director;
Vietnam, Buffalo Boy, Nguyen Vo Nghiem Mihn, director.

The 78th Academy Award nominations will be announced on Tuesday, January 31, 2006, at 5:30 a.m. (California time), in the Academy's Samuel Goldwyn Theater. The Academy Awards ceremony will be held at the Kodak Theatre on Sunday, March 5, 2006.

jueves, noviembre 17, 2005

REMEMBRANZA DEL POLVO PERDIDO

Hace unos años, viví en Los Angeles. Acababa de terminar mi maestría, y decidí que me merecía un buen año de descanso y buena vida en la Costa Oeste. Compartía un apartamento de dos cuartos con un canadiense que había estudiado conmigo en Nueva York. Aunque él era un poco mayor que yo, ambos estábamos en esa etapa en la vida de un joven adulto en que lo más importante es tener la vida sexual de un príncipe saudí. De más está decir que lograrlo fue más difícil de lo que pensábamos. En el fondo, fue cuestión de suerte, y una inversión mínima de dinero.

Resulta que para esa época un amigo de Puerto Rico estaba haciendo una película y me llamó para pedirme un favor. En esencia, lo que él quería era que yo le dejara usar mi dirección postal en el casting call que iba a pautar en la revista Backstage. Yo le dije que claro, que cómo no. Y me olvidé del asunto. Hasta que un día, llegué al edificio y había un revolú en el mail room. Habían llegado cientos de sobres manila dirigidos a mi apartamento. Jens, mi roommate, no sabía nada –se me había olvidado decirle. Eran sobres llenos de headshots. Recuerdo que la estaca era casi cuatro pies de alto. Continuarón llegando durante el resto de la semana. Y hubo hasta un tipo que decidió entregar el suyo a la mano. ¡Eso fue freaky!

Unos días después, el amigo cineasta llegó y se llevó los sobres; hizo sus audiciones y regresó a Puerto Rico. Pero antes de irse, nos contó de las audiciones, sobre todo de la brega con las actrices que por estar en una película, hacen lo que sea, and I mean, lo que sea.

Eso fue lo que nos dio la idea a Jens y a mí. Escribimos un casting call para una película ficticia y pagamos los $257 que cuesta publicarlo en Backstage. Luego, alquilamos un teatro pequeño –eso nos salió como en $900 por dos días- y empezamos a citar a los actores, perdón, quise decir a las actrices. Un amigo de Jenz nos ayudó con la lectura de los papeles masculinos, con la condición de que lo incluyéramos en nuestro esquema. Una muy buena amiga mía aceptó a estar allí por aquello de que hubiera más gente. Con ella vinieron dos amigas más –dos postfeministas a la que les divertía la idea de coger de pendeja a tanta rubia tonta.

Y de hecho, lo más que llegaron fueron rubias tontas. Jenz hizo de productor y yo de director. Estábamos completamente en character. Él era lechón con un eterno power trip. Yo era el realizateur. Tuvimos hasta el descaro de hacer un segundo día de call backs.

Diría que 99.7% de las actrices eran malas de a vicio. Pero de ésas, 87.5% eran puras jevotas. Durante las audiciones procuramos que todo el mundo se enterará de dónde íbamos a estar janguendo esa noche. Ya el lector se puede imaginar lo que pasó.

No miento si digo que en un período de más o menos tres semanas yo tuve más sexo de lo que he tenido en el resto de mi vida, en varias ocasiones con más de una mujer a la vez. Ya al mes estaba harto de tanto sexo, y decidí cogerme un break, Jenz, por su parte, cometió el error de enchularse, pero eso no le duró ni dos meses, la cantidad de tiempo que le tomó a la jeva darse cuenta de que todo era un show.

Decidimos hacerlo de nuevo tres meses después –eso fue lo que nos tomó ahorrar los más o menos $2,000 que costaba la jugadita. Pero no funcionó. Las caras eran las mismas de tres meses antes, seguían dispuestas a lo que sea por un papel en una película, pero se había regado la voz. Todo Los Angeles parecía saber. Fue una pesadilla. A mí me pasó en dos ocasiones que me encontré de mesera en un restaurant a una de aquellas actrices y para qué era eso. No quería ni imaginarme que ingredientes sorpresa podía haber en la sopa. Las rubias tontas habían tenido su venganza.

Yo decidí adelantar mi regreso a Puerto Rico por dos meses. Así de friqueao estaba. Sin embargo, ahora que recuerdo aquel mes de degenere sexual, no descarto hacerlo de nuevo en el futuro, en otra ciudad, claro está.

miércoles, noviembre 16, 2005

CASH ONLY

Anoché tuve un sueño americano. Yo era Reese Witherspoon, y estaba en el show de Conan O’Brian hablando de mi actuación en “Walk the Line, la reciente película sobre la vida de Johnny Cash, con Joaquín Phoenix en el papel del legendario cantante de música country. En el sueño, le estaba explicando a Conan, y al público televidente, que Cash era un hombre que tuvo un sueño y nunca paró hasta conseguirlo. Fue entonces, que me desperté, confundido, pues hasta ese momento, siempre había pensado que lo que Johnny Cash tenia era mucho talento y mucha personalidad.

martes, noviembre 15, 2005

EL CAYO SIGUE SIENDO NUESTRO


Los invito a que visiten la página de comentarios sobre la película Cayo en el "IMDb". Gracias al lector que me hizo el día, refiriéndome a esta joya de la literatura cibernética. A continuación, dos de los comentarios.

Very Bad Movie, OK for TV
10 October 2005
Author: Yiye from United States

Humm where do I start.

First off, Cayo doesn't offer any interesting visuals. Its a shame since it was filmed mainly on the beautiful island of Culebra (i know its beautiful because I've been there, if you judge it from watching the film..well..its just OK) The photography is just awful, not even the slightest effort (filters, waiting for the best time of day) to produce nice colors. Basically looks like it was filmed at midday on the harsh tropical sun, with skies blown out, silvery and turbid water (seen on some water shots). Looks like production compromise, not on purpose.

Its cool, but nothing new, that they told the story by methodically revealing the scenes of the character's past while they live in their presently tragic situation. Its what keeps one semi interested. But, while the clothes and styling somewhat matches the different times of the actors lives, the movie doesn't use color or any distinctive photography styles to distinguish them. Also, The director tries to blend in some political satire and humor but it isn't effective and its way to literal and silly on the verge of stupid.

There are some decent scenes. The detoxification of the female drug addict (Daris Mejias) is one of them, and the acting of young Ivan (Kamar De Los Reyes) while he is having some problems with his wife in his NYC is OK (along with Roselyn) making for a decent scene.

But overall the movie looks like too many people made choices on it and doesn't have a definitive style. Which is a shame since its concept warranted a much much better treatment.

Ese comentario suscitó la siguiente respuesta::

This movie deals with the life and times of three friends. How life plays tricks on them and how in the end they promote feelings and reactions among those around them.
4 November 2005
Author: pmuniz from Puerto Rico

This comment is to Yiye. I am the producer of the film and would like to know, if possible who are you or what are you. I am open to the most severe criticism, I have a tough skin. But would like to refer you to the rest of the viewers and comments herein included. I feel that most of your comments are charged against the film for other reasons not really related to the film. Maybe you saw a presentation at a movie house that had a blurry projector. The photography by Milton Grana has been hailed by those who know about Cinematography and those who do not. I do not find your comments fair to him, among others.

I hope you can someday watch this film from a not prejudiced vision.

We feel we have a good film. We do not think we have the best, or a perfect film...if that is a possibility.

domingo, noviembre 13, 2005

LO QUE ME PASA POR VER TV

La otra noche, cambiaba canales, y en CNN, Anderson Cooper anunciaba “never before seen footage” de las atrocidades perpetradas por el regimen de Kim Il Sung en Corea del Norte. El vídeo clandestino mostraba ejecuciones públicas de personas condenadas bajo cargos de “tráfico humano”. ¿Tráfico humano? La productora de CNN que estaba sirviendo de recurso, se sintió en la obligación de aclarar que, en el contexto de Corea del Norte, tráfico humano es diferente a lo que estamos acostumbrados en el mundo occidental. Estas personas estaban siendo ejecutadas por ayudar a otras a escapar de la dictadura de Kim Il Sung. A ver si entiendo: los que sacan dominicanos de la República Dominicana son criminales, pero los que sacan coreanos de Corea del Norte no lo son. Hmm… Hace sentido. Más adelante, mientras hablaban de las cárceles coreanas, la productora, que estaba allí para promocionar un especial sobre el tema que saldrá al aire esta noche, destacó el problema de hacinamiento. Corea del Norte, dijo, es de lo países con más presos per capita en el mundo. Y yo pensaba: o sea que está ahí ahí con los Estados Unidos, que, escuché hace un tiempo, está liberando presos por falta de espacio en las cárceles. A lo que voy es que es increíble cómo CNN, que pretende ser liberal, sobre todo ante el conservadurismo recalcitrante de Fox News, termina haciéndose eco de la agenda bélica de los republicanos. Reportajes como éste del régimen de Kim Il Sung no hacen otra cosa más que preparar el camino para una futura acción militar en Corea del Norte. Quizás lo que pasa es que CNN está buscando un nuevo frente de guerra donde tratar de recuperar el terreno perdido a Fox en la tierra de Saddam.

LA FELICIDAD ES UNA PISTOLA CALIENTE

Hoy cumplo 32 años. He decidido que la canción tema de este día es “Happiness Is A Warm Gun”, de los Beatles.

sábado, noviembre 12, 2005

BALSAMIC DREAMS

Algunos de ustedes han reaccionado apasionadamente a los dos posts titulados “Entre la espada y la pared”, sobre mi experiencia en una charla de introducción a una red de mercadeo, dada por un tal Sr. Pérez. Creo que, con dichos posts, he tocado un tema cada vez más neurálgico para los que nacimos después de 1964, el asunto de qué vamos hacer con esa plaga conocida como los Baby Boomers.

Alguien me decía ayer que este año, el baby-boomer promedio cumple 60 años. Son ellos los que controlan la economía, el poder político y, por supuesto, los medios de comunicación. Son los que desde hace mucho tiempo están tomando las medidas necesarias para nunca morirse. Son los que se retirarán y, al hacerlo, quebrarán el seguro social. A nosotros, los de la generación X, nos tocará subvencionarles las Viagras. Y ni hablar del poder político que seguirán teniendo en virtud de lo numerosos que son.

Como dije en los comentarios a uno de los posts anteriores sobre el tema, la mejor condena de los baby-boomers que conozco es la de Joe Quenan, un baby-boomer aborchonado de su generación, que escribió el libro “Balsamic Dreams: A Short But Self-Important History of the Baby Boomer Generation”.

Lo que sigue es un extracto del primer capítulo de Balsamic Dreams, titulado “J’accuse”:

Throughout history, generations imbued with a messianic complex have inspired a wide range of powerful emotions. The Jacobins who decapitated Louis XVI inspired dread. The insurgents led by George Washington inspired admiration. The twentysomething barbarians who accompanied Genghis Khan on his pitiless campaigns through Central Asia and Eastern Europe inspired despair, the young Germans who put Hitler's name in lights inspired horror, the fresh-faced Frenchmen and Frenchwomen who built the cathedrals of Chartres and Amiens and Beauvais inspired awe.

Baby Boomers fall into a somewhat different category. As convinced of their uniqueness as the Bolsheviks, as persuaded of their genius as the Victorians, as self-absorbed as the Romantics, as prosperous as the ancient Romans, the Baby Boomers, despite a very good start (the Freedom Riders, Woodstock, Four Dead in Ohio, driving Nixon from office, Jon Voigt in Midnight Cowboy), have never put many points on the historical scoreboard. Feared and admired in their youth, today they inspire little more than irritation. Not outright revulsion, not apoplectic fury, but simple, unadorned garden-variety irritation. With a bit of contempt thrown in on the side.

The single most damning, and obvious, criticism that can be leveled at Baby Boomers is, of course, that they promised they wouldn't sell out and become fiercely materialistic like their parents, and then they did. They further complicated matters by mulishly spending their entire adult lives trying to persuade themselves and everybody else that they had not in fact sold out, that they had merely matured and grown wiser, that their values had undergone some sort of benign intellectual mutation. This only made things worse, because they had now compounded the sin of avarice with the sin of deceit. Besides, it was useless to deny their monstrous cupidity; banks keep records of this sort of thing.

They had not been the first generation to sell out, but they were the first generation to sell out and then insist that they hadn't. Here was their central tragedy, the poisoned well from which all their unhappiness flowed. They were conflicted. They were flummoxed. Their center would not hold, because they were no longer centered. They could not process the information that their guilt was misplaced, that no one in the United States of America would ever blame anyone for devoting every single moment of his life to the pursuit of filthy lucre -- as long as he didn't try pretending that he hadn't. The heartbreak of the Baby Boomer generation lay in the fact that they could not fully enjoy the wealth they had moved heaven and earth to acquire because they felt tainted by their ravenous greed. Baby Boomers would have turned out so much saner and happier if they had ripped a page from the Founding Fathers' playbook and said, "Yes, I chopped down that cherry tree. And then I securitized it into four equal tranches, with the first two splices reverting to the underwriter. You got a problem with that?"

Clearly, this refusal to own up to their own acquisitiveness is not the Baby Boomers' only broken promise. They said they wouldn't become crass and vulgar. But they are. They said they would never become horrid conformists. But they are. They said they would not be ruthless materialists. But then they embraced a complete Lifestyle Über Alles philosophy, carping and caviling at dinner parties over which local bakery sold the best sourdough boules, which kayak shop offered the most attractive warranties, which brand of grappa was most culturally authentic. It was a generation that once prided itself on questioning authority. Now its only questions were referred to authorities like Williams-Sonoma: "Is l'aceto di Modena superior to l'aceto di Reggio? Is Calasparra or arborio rice more desirable in preparing paella a la Valencia?" Their utopian visions of peace, love and understanding had been replaced by balsamic dreams.

In the end, Baby Boomers didn't deliver on any of their promises. Instead, they were a case study in false advertising. They professed to go with the flow, but it was actually the cash flow, and they most certainly did not teach their children well, as they were too busy videotaping them. Instead, they took a dive. They retreated into the deepest recesses of their surprisingly tiny inner lives. They became fakes, hypocrites, cop-outs and, in many cases, out-and-out dorks. And the worst thing was: Most of them didn't realize it.

MALDITA SEA LA JUSTICIA

Algo interesante ha empezado a pasar en mi condominio. Desde la semana pasada, alguien está dejando revistas en el vestíbulo. Yo las he visto ahí, puestecitas en una mesita, al lado de los apartados de correo, y he asumido que están ahí para que la gente se las lleve. El otro día, me llevé una Entertainment Weekly. Pero hoy, grande ha sido mi sorpresa al ver que a las revistas se le han sumado libros. Uno en específico ha llamado mi atención: “Maldita sea la justicia”, el best-seller de Chaar Cacho. Nunca pagaría por este libro en una librería, pero encontrármelo ha sido motivo de felicidad. Una nueva adquisición para mi colección de “joyas” de la literatura puertorriqueña.

jueves, noviembre 10, 2005

ENTRE LA ESPADA Y LA PARED, PT. 2

“Proveer una amplia gama de productos, servicios y capacitación dentro de las industrias del turismo y la tecnología, para asegurar la oportunidad de éxito, independencia económica y vacaciones inolvidables, rebasando récords y logrando un excelente sitial en el dinámico mundo de las redes de mercadeo”, así lee la misión de TravelOne.

Ésa era la maravillosa oportunidad de negocio que el Sr. Pérez tenía para nosotros, como parte de esta encerrona perpetrada por una actriz y modelo. El negocio conlleva la compra de una tarjeta valorada en $500, que le da a su portador los beneficios de un agente de viaje. Ése es el nivel más básico de participación. El cliente tiene la opción de atraer más clientes, aumentando así su margen de ganancia.

¿Cómo funciona la cosa? El cliente puede aprovecharse de toda una serie de viajes que se hacen para agentes de viajes. Estos viajes, que tienen como propósito familiarizar al agente con un destino en particular con bastante económico. El cliente también puede beneficiarse de los descuentos para agente de viajes, que ofrecen hoteles, compañías de alquiler de carro, etc.

Digamos, por ejemplo, que usted quiere irse de vacaciones a España. Usted llama al hotel de su predilección y les pregunta si tienen disponibilidad para las fechas de su viaje. Luego, les pregunta si tienen alguna cortesía para agente de viaje. En ese momento, el representante del hotel le pedirá el número de tarjeta y eso redundará en un jugoso descuento.

Yo oía todo esto y sólo podía pensar en lo siguiente: ¿qué necesidad tiene el Sr. Pérez de regatear el precio de un cuarto de hotel? Estamos hablando de una persona que, entre su columna de El Nuevo Día, sus libros y charlas de humortivación, su programa de radio, sus programa de televisión y sus anuncios de DirectTV, debe echarse fácilmente más de $200,000 al año.

El Sr. Pérez explicó que en pocos meses, dedicándole bien poco tiempo al asunto, había hecho más de $20,000. Y yo me preguntaba otra vez: ¿qué necesidad tiene este hombre de usar sus martes por la noche para hablarle a un grupo de desconocidos sobre cómo viajar por poco dinero?

Yo me fui de allí pensando que el Sr. Pérez es mucho más charro de lo que pensaba.

ENTRE LA ESPADA Y LA PARED, PT. 1

Los que me conocen ya conocen esta historia:

Una actriz y modelo puertorriqueña, una de ésas que alguna vez “actuó” en una telenovela –cuando todavía se producían en Puerto Rico– nos invita, a un amigo y a mí, a su fiesta de cumpleaños en su academia de modelaje y actuación.

Que yo sepa, ella no es mi “amiga”; tampoco lo es de mi amigo; es sólo una conocida con la que ambos trabajamos en un proyecto que no aparece en mi resumé –con eso lo digo todo. Por qué nos invitó a su cumpleaños es “anyone’s guess”.

Pero eso no es todo. La actriz y modelo le mencionó a mi amigo algo de que iba a aprovechar la ocasión para presentar un nuevo proyecto en el que estaba involucrada, bla, bla, bla. A mí esto me sonó bastante sospechoso. Y hasta le dije a mi amigo que yo tenía mejores formas de pasar un martes por la noche.

El martes por la noche llegó y no tenía nada que hacer. Llamé a mi amigo y le pregunté si tenía planes de ir al cumpleaños de la actriz y modelo, y me dijo que sí, que ella había hablado de trabajo y las cosas no están muy buenas que digamos en ese departamento. “Te encuentro allá", le dije antes de enganchar.

Por qué fuiste, me preguntarán. Honestamente, fui por dos razones: (1) porque soy un morboso de mierda, y (2) porque supuse que allí habría más actrices y modelos –they travel in herds.

Llego al lugar. Subo unas escaleras y rápido me encuentro a la cumpleañera que me saluda efusivamente. Le pregunto si ya llegó mi amigo, y ella me dice que sí, que me está esperando en el salón con el resto de la gente.

Camino hasta el salón, abro la puerta y esto es lo que veo: un grupo de personas sentadas –no muchas todavía–, esperando a que empiece “algo”. Hay una mesa y, sobre ella, una laptop conectada a un proyector. Lo que sea que va a pasar incluye una presentación de PowerPoint. Es en ese momento que me doy cuenta de que he caído en una trampa. Estoy en una de esas reuniones que hacen para meter a la gente en redes de mercadeo y negocios piramidales.

La cara de mi amigo vale un millón de pesos. “Te lo dije”, le digo telepáticamente desde la puerta. Entonces, escaneo el salón para ver quién más está aquí. Reconozco a un loco con el que trabajé en "otro" proyecto hace par de años. Pero él no es la única persona conocida. También reconozco la cara del que –entendí en ese momento– estará a cargo de la presentación: un tal Sr. Pérez.

Continuará.

martes, noviembre 08, 2005

HORA CERO PARA FERNANDO FERRER

Fernando Ferrer está jodío, bien jodío. Anoche vi en la tele un anuncio de Michael Bloomberg que más poderoso no podía ser. El anuncio no era más que una ristra de rostros expresando su apoyo al actual alcalde de Nueva York. Casi todos eran ciudádanos comunes y corrientes. Excepto tres. Entre las primeras caras, estaba Magic Jonhson, y, luego, hacia el final estaba Kathleen Turner diciendo que ella es demócrata, pero que va a votar por Bloomberg. Pero eso no es todo. El anuncio cierra con la imagen de Ed Koch, exalcalde demócrata de la ciudad, manifestando su respaldo a Bloomberg. Contra un anuncio así, Ferrer no tiene la más mínima esperanza, tal y como se refleja en las encuestas, que ponen a Ferrer bien, pero que bien atrás.

No he seguido la contienda electoral lo suficiente como para poder evaluar los méritos de cada uno de los candidatos. No sé qué propone Ferrer que se diferencie de lo que propone Bloomberg. Y no creo que sea el único. Tengo el presentimiento de que la gran mayoría de los niuyorquinos tampoco se ha enterado.

Uno podría asumir que la ventaja de Bloomberg en las encuestas se debe al simple hecho de que ha hecho un buen trabajo como alcalde, y que la gente lo reconoce. Pero Nueva York es una de las ciudades más demócratas de los EE.UU. Tampoco estamos ante uno de los mejores momentos del Partido Republicano. ¿Cómo entonces explicar lo desigual de la contienda?

La explicación es bastante sencilla: raza, etnicidad, como quiera llamarle. La última vez que Nueva York tuvo un alcalde de color fue el demócrata Dinkins, y los newyorkers no tienen un recuerdo muy grato de él. Fue durante su incumbencia que el crimen de Nueva York llegó a sus niveles más alto en toda la historia de la ciudad. Luego, vino Giuliani y salvó a la ciudad de los narcos.

La historia es mucha más compleja que esto. Hoy, por ejemplo, sabemos que Dinkins durante sus últimos años en la alcaldía tomó medidas que años más tarde, cuando él ya no estuviera, redundarían en una reducción de la actividad criminal. Pero así cómo la historia es más compleja de lo que parece, la percepción del público es más superficial de lo que uno se cree. En la mente de los ciudadanos, los demócratas siguen siendo manos blandas que no están preparadas para bregar con una ciudad tan salvaje como NYC. Para eso, hacen falta políticos mano dura, de talante frío y calculador, como Bloomberg, y Rudy antes que él.

Esto me lleva a pensar que el gran error de Pedro Rosselló fue haberse ido a Virginia en el 2001, cuando se fue corriendo de PR. Si en vez de Virginia, se hubiera ido a Nueva York, quién sabe lo que hubiera pasado. Con el apoyo de los Clinton, le hubiera ganado las primarias a Ferrer y le hubiera hecho mucho mejor competencia a Bloomberg. Hasta me imagino los anuncios de campaña: “Mr. Bloomberg, don’t push it.”

Pensaba que la razón por la que Freddie Ferrer nunca iba a ganar las elecciones es porque es puertorriqueño. Pero me acabo de contradecir al plantear que Pedro Rosselló, que también es puertorriqueño (a pesar de sí mismo), sí hubiera tenido un chance frente a Bloomberg.

¿Será entonces un problema de clase? ¿El criollo versus el patricio? ¿O sólo será que Freddie simplemente no tiene el carisma, o, mejor aún, el sex appeal, para ni siquiera convencer a los puertorriqueños de que voten por él? Diría que un poco de ambas que, después todo, son lo mismos, pero no es igual.

Pero insisto en que la raza y/o etnicidad son un issue. Y no sólo en la mente de anglos, sino en la mente de los latinos también. Póngase a pensar: ¿qué puertorriqueño que viva en NYC votaría por otro puertorriqueño para alcalde de NYC? Ahora pregúntese: ¿Qué latinoamericano votaría por un boricua? Y ni hablar de los negros, ésos todavía resienten que el culo de JLo sea más famoso que el de cualquier mujer afroamericana.

Pero nada más patético que la participación de políticos locales en la campaña de Freddie. A estas alturas del juego, ¿Aníbal le trae votos a alguien? ¡Por favor! Es como cada vez que veo a Papo Coss involucrado en una lucha de reinvindicación social. Él es el representante (y quién sabe si conciglieri) de Osvaldo Ríos. ¿No se dá cuenta de que su presencia le hace más daño que provecho a la lucha.

Sila Calderón está más clara, mucho más clara. Ha tenido la inteligencia de irse a la cama de Bloomberg, y la sabiduría de no hacer el más mínimo de campaña en su nombre. Así es cómo se llega al poder. Y en cuanto al issue de clase, sólo pido que consideren lo siguiente: ¿Sila se acostaría con Freddie Ferrer? Nada más con el testigo.

lunes, noviembre 07, 2005

A NIGHT AT THE ROXBURY

La otra noche tuve una de las experiencias más surreales de mi vida. Iba con M. para una fiesta de escritores en un apartamento del edificio El Monte Sur. Vamos, la íbamos a “crashear”; conocíamos a par de gente que iba a estar allí, pero no al dueño. Pero que se joda. Llegamos, nos parqueamos, entramos al edificio y subimos hasta el piso que era; nos salimos del ascensor y caminamos hacia la fiesta, dejándonos llevar por el ruido que salía de ella. En el pasillo, frente al apartamento, había un grupito, con una que otra cara conocida. Saludamos, nos presentamos, y entramos. Adentro, me encuentro más gente conocida, saludo, me presento. Me encuentro a la que fue mi amor platónico en high school. Eso sí que me coge por sorpresa. Pero la saludo; ella me presenta a su marido, mucho gusto, es un placer. Es entonces que miro a mi alrededor y me pregunto dónde está la gente que esperaba encontrar en la fiesta. No los veo. Sin embargo, veo caras conocidas. Y ellos también me conocen, algunos hasta hacen el aguaje de estar contentos de verme, qué bueno que viniste, me dicen. Voy a la cocina y le pregunto a la hermana de un amigo: “Oye, ¿este es el apartamento de Karen?” Y ella me contesta: “No, éste es el apartamento de Elisa”. Claro que yo sé quién es Elisa, cogió clase conmigo en la universidad, pienso. Pero hay algo que no cuadra. Le pregunto a la chica: “¿Qué número es este apartamento?”. Y ella: “El 1508.” Y yo digo: “¿O sea que éste no es el 1540?”. Sin pensarlo dos veces, fui adonde M., que ya había sacado una cerveza de la nevera, y le dije: “Vámonos que estamos en la fiesta que no es.”

SOBREDOSIS DE BLOG

Hace poco leí que durante estos últimos meses del 2005, la cantidad de blogs en el internet se va a duplicar. No recuerdo los números exactos, pero estamos hablando de millones de blogs. Y parece que los puertorriqueños somos parte de ello. Últimamente, he estado, como dice Plaza, “patrullando” la blogósfera boricua y la mayoría de los blogs que encuentro son de reciente creación. Eso me hace a mí, con apenas seis meses de experiencia, casi un veterano.

Así que todo el mundo y su abuela tiene un blog. Y no hablan de más nada que eso, que es lo más freaky. La otra noche estaba en una fiesta de escritores, y todo el mundo estaba hablando de su blog. ¡Hasta yo hablé del mío, qué diablo! Todavía estoy tratando de entender el fenómeno.

Hace unos días, recibí un e-mail del autor del e-mail que publiqué hace una o dos semanas aquí en el blog, no el de los problemas de comunicación en la oficina, sino el otro, el que solicitaba donativos en efectivo para un pobre, pero querido amigo. Me decía la persona en el e-mail que había sentido tristeza al ver que había publicado su e-mail, y se reafirmaba en haberlo enviado. Yo le contesté que asumía completa responsabilidad por haberlo publicado y que le pedía disculpas por cualquier molestia. También le agradecí que me hubiera comunicado su sentir.

Una cosa que me reclamó esa persona es que hubiera eliminado los nombres (y supongo que también los números de teléfonos) incluidos en el e-mail. La persona supuso que mi intención al hacerlo fue hacerla sentir vergüenza. Esto me puso a pensar.

No puse los nombres por dos razones: (1) respeto la privacidad de las personas, y (2) mi blog tiene sólo un protagonista: yo. O dicho de otro modo: La Ínsula Hirsuta es una radiografía del mundo interno de su autor. Aquí no se habla de más nadie que de mí. Que me acusen de solipsismo, pero de eso se trata tener un blog.

Fue así cómo entendí lo siguiente: quizás la razón por la que todo el mundo habla de su blog es porque ésa es nuestra forma de comunicarnos con el resto del mundo. Me pasa, por ejemplo, con Plaza; hay cosas que no tengo que decirle o contarle, pues ya las leyó en el blog. Eso hace que, cuando nos vemos, podamos usar el tiempo para hablar de cosas más importantes que el blog.

domingo, noviembre 06, 2005

EN BABIA (FRAGMENTO)

A continuación, el famoso pasaje de "En Babia" (1940), de José I. De Diego Padró:

Según contó, lo primero que se experimenta al fumar cannabis es un leve enfriamiento de las extremidades, y sed, mucha sed, pero que pasa pronto, por razón de que es una sed ficticia. Luego, debilidad para controlar y dirigir las ideas. Los párpados, alternativamente, se cierran y se abren lentos, pesados, y parece como que los ojos giran dentro de las órbitas. El tacto, por gradaciones, se pierde, Los demás sentidos, juegan a cual fantasmagorice más. Las potencias volitivas y la sensación de unidad del cuerpo, o cenesthesia, se borran, huyen. Sobreviene, pues, una dulce, una deliciosa laxitud. Se comienza entonces a sonreir vagamente, sintiendo al par un infinito desdé por todo. Después, conforme se sigue fumando, la lengua se inmoviliza, yerta, hacia la bóveda de la boca. Y se inunda la mente de errores, de alucinaciones que maravillan. En casos, se interroga uno: “¿Pero dónde estoy yo? ¿Por qué este frío, este miedo? ¿Por qué me mirará tanto aquel esquimal?...” Y óyese en la lejanía un fragor de tormenta: el restallar de turbulentos marullos. Al fin, la calma; y el ambiente se satura de un fuerte olor a ozono mezclado de azufre… Ahora, la realidad circundante delínease con más precisión. En efecto… Reconozco el sitio donde estaba, en donde me eché a fumar. Los objetos alrededor se me figuran traslúcidos y flotan, se bambolean, se imprimen movimientos raudos y misteriosos. De repente, una tarántula con cara de mujer… ¿De qué punto ha salido? No se sabe. Tal vez de los entresuelos de la imaginación. La tarántula brinca ante mis ojos alelados, ejecuta equilibrios en el espacio, se encrespa, corre y desaparece, dejando tras sí una diminuta sortija de humo. Luego, carcajada va y viene, porque unas patas peludas me hacen cosquillas en el escroto. Y es en este período de la intoxicación –concluyó diciendo el de la verruga- cuando el cerebro alcanza su mayor lucidez: adquiere internamente los resplandores de un gran arco voltaico.

sábado, noviembre 05, 2005

EN BABIA

La primera vez que fumé marihuana fue en enero del 2001; tenía 27 años. Fue en casa de una amiga que vivía en el Viejo San Juan, el fin de semana de la San Sebastián. En realidad, ésa no fue la primera vez que fumé, pero sí la primera vez que sentí algo al hacerlo. No me atrevería a decir que me arrebaté. Me dio pavera, pero no recuerdo haber tripeado. Esa noche dormí en casa de la jeva con que estaba saliendo en ese momento. Recuerdo que, ya en la cama, me puse paranoico y hasta me freakié. Me vine a tranquilizar al día siguiente cuando la amiga cuya casa fue testigo de mi primera fumata, me explicó que ése puede ser uno de los efectos del pasto.

Hace poco más de un año, me encontré fumando con tres amigos en la placita de Humanidades. Esto fue años después de haberme graduado de la UPR. Era un sábado y no había casi nadie en el área. Ya arrebatado, le propuse a mis amigos que fuéramos a la Colección Puertorriqueña de la Lázaro. Así es mi trip, sorry.

Mi mente arrebatada se acordó de un pasaje sobre el pasto que aparece en una novela de los años cuarenta, y quise compartirlo con amigos narcómanos. Saqué “En Babia” de José I. De Diego Padró, y lo leímos en una de las mesas. Después, creo que sacamos un microfilm de un periódico de los setenta. Hubiéramos visto otros si no hubiera sido porque la biblioteca estaba a punto de cerrar.

Mi amigo, y colega bloquero, Rafael Plazaola es el que, con un post en su blog, me ha hecho acordarme de aquella sesión en la UPR. Hoy hablaba con él sobre De Diego Padró. Estoy de acuerdo con Plaza en que hay una correspondencia bastante clara entre el autor de “En Babia” y Edgardo Rodríguez Juliá. De hecho, Rodríguez cita directamente a De Diego Padró en su reciente y estupendo libro “San Juan. : Ciudad soñada”.

Sin embargo, es escandaloso lo poco que se valora la obra de Diego Padró. Después de leer lo que le dijo Enrique Laguerre a Plaza, creo que esta indiferencia se deba a razones políticas. La historia, como bien sabemos, la escriben los vencedores, en este caso los Antonio S. Pedreiras, Jaime Benítez y Enrique Laguerres de la vida. Los borrachones, degenerados y locos suelen ser no más que coloridas notas al calce. Éste es el caso de Palés y de su íntimo amigo De Diego Padró. Pero ni a hablar de escritores más recientes que han sido marginados por razones que no tienen que ver con lo que escriben. Me vienen a la mente Manuel Ramos Otero, José María Lima y Pedro Pietri, libra por libra, los mejores escritores boricuas de los últimos cuarenta años.

Hace unos años, a instancias de un amigo y con la ayuda de otros, traté de armar una lista de los mejores novelista puertorriqueños de todos los tiempos. Esta tarea es más difícil de lo que uno se cree pues en la literatura boricua, la mayoría de los escritores más reconocidos son poetas o cuentistas.

No recuerdo qué orden tenía la lista, pero trataré de reconstruirla a continuación.

Top Ten Puerto Rican Novelists:

10. Wilfredo Matos Cintrón
9. César Andreu Iglesias
8. Pedro Juan Soto
7. Magali García Ramis
6. Mayra Santos Febres
5. José I. De Diego Padró
4. Mayra Montero
3. Emilio Díaz Valcárcel
2. Luis Rafael Sánchez
1. Edgardo Rodríguez Juliá

Menciones honorarias a:
Eugenio María de Hostos
Ramón Emeterio Betances
René Marqués

Premio Julio Cortazar a la mejor novela experimental:
Manuel Ramos Otero, por La Novelabingo

Close but no cigar (o aún siendo evaluados):
Rafael Acevedo
Manuel Abreu Adorno
Luis López Nieves
Marta Aponte Alsina
Josean Ramos
Kalman Barsy

Considerados, pero felizmente excluidos:
Enrique Laguerre
Manuel Zeno Gandía
Manuel Alonso
Rosario Ferré
Olga Nolla
Esmeralda Santiago
Losada, el de la Patografía

Estamos esperando la 1ra de novela de:
Juan López Bauzá
Pedro Cabiya
Rafa Franco
Pepe Liboy
Guillermo Rebollo Gil
Urayoán Noel
Marcos Pérez Ramírez
Ana Lydia Vega
Juan Carlos Quiñones
The Information Soldier

Dios nos libre de que a estos cinco se les ocurra escribir una novela:
Joserramón Melendes
Eric Landrón
Etnairis Rivera (a menos que sea su autobiografía erótica)
Silverio Pérez
Rafael Plazaola (self-appointed)

Próximamente, estaremos publicando otras listas, a ver si los artistas y escritores del patio cogen vergüenza de una vez y por todas.

ABORTION CLINIC

De acuerdo a una noticia publicada en El Nuevo Día de hoy, el año pasado en Puerto Rico, se reportaron aproximadamente 12,000 adolescentes embarazadas. De éstas, casi 3,000, o el 25%, abortaron. Desafortunadamente, el artículo no ofrece información sobre el perfil demográfico de las jóvenes, tanto de las que dieron a luz como de las que tuvieron un aborto.

Leyendo esto, me acuerdo de un libro que leí hace poco, titulado “Freakonomics”, escrito por un joven y controvertible economista estadounidense. El libro tiene como propósito exponer ciertas falacias que pasan por “conventional wisdom”.

Uno de sus planteamiento más polémicos tiene que ver con la dramática reducción de la criminalidad que se registró, durante la década de los noventa, en Estados Unidos, con Nueva York como caso ejemplar. Las razones que se han dado para este fenómeno son muchas. Hay una que apenas se ha mencionado, pero que, para este economista, es de las que más peso tiene: Roe vs. Wade.

Roe vs. Wade es la decisión del Corte Suprema de los EE.UU. que legalizó el aborto. Esto fue a mediados de los setenta. La lógica de este economista es la siguiente: la legalización del aborto significó una reducción en los nacimientos de niños que quince años más tardes, tendrían una alta probabilidad de convertirse en criminales. El autor se basa en una serie de estudios microeconómicos cuyos resultados son bastante contundentes.

Con los cambios actuales en la composición de la Corte Suprema, existe la posibilidad de que, dentro de poco, la mayoría de los jueces vote a favor de revocar Roe vs. Wade. En ese contexto, resulta sorprendente que la teoría de este economista de la Universidad de Chicago no esté sonando más, sobre todo en los medios liberales (léase CNN, el New York Times, etc.)

Quizás este silencio se deba a lo “politically incorrect” que puede sonar esta explicación. Me imagino que nadie quiere ofender a los negros y/o pobres que podrían sentirse aludidos, y hasta ofendidos, por las implicaciones racistas y clasistas de esta teoría, si mal comunicada.

Todo esto me lleva a pensar en el caso de Puerto Rico. Que yo sepa, en Puerto Rico no se ha visto una disminución de la criminalidad como la que se ha visto en EE.UU. Habría que ver qué impacto tuvo Roe vs. Wade en la isla. Y ni hablar de los experimentos que se hicieron con píldoras anticonceptivas.

Que en Puerto Rico, el año pasado, 25% de las adolescentes embarazadas hayan optado por un aborto me sorprende por lo alto del número. Hubiera pensado que era menos por lo supuestamente conservador y cristiano que es este país. Como dije, el artículo del Nuevo Día no dice nada del perfil socioeconómico de las adolescentes que decidieron terminar su embarazo, pero algo me dice que, en su mayoría, deben venir de un nivel socioeconómico alto.

El aborto sigue siendo uno de los tabúes sociales más fuertes. Es algo de lo que nadie habla. La cantidad de mujeres que ha tenido uno es mucho mayor de lo que la gente se cree. No se me olvida el cuento de una amiga, de cuándo estaba en escuela superior y contado muchos anos después. Luego de consumado el aborto, la mamá le dijo: “Ahora vas, llamas a tus amigas y les dice que te bajó la regla.”